En un mundo dividido por guerras religiosas y conflictos de poder, surge un asesino que desafía las reglas de su propia orden. Con cada salto desde lo alto de una torre, cada hoja oculta que se desenvaina y cada paso silencioso en la multitud, el destino de toda una era está en juego.

En Assassin’s Creed, te embarcas en una travesía que te llevará al corazón de la Tercera Cruzada, donde la justicia y el caos son los únicos compañeros de un verdadero asesino.

En el siglo XII, mientras la Tercera Cruzada se desata entre las fuerzas cristianas y musulmanas, la Hermandad de los Asesinos busca preservar el equilibrio en un mundo sumido en el caos. Eres Altaïr Ibn-La'Ahad, un guerrero habilidoso pero arrogante, cuya imprudencia pone en peligro a toda la Orden. Tras fallar una misión crucial, eres despojado de tu rango y debes redimirte cumpliendo una serie de objetivos letales: eliminar a nueve figuras clave responsables de prolongar la guerra y el sufrimiento en Tierra Santa.

Tus objetivos no son simples soldados; son líderes, mercaderes y políticos influyentes, todos aliados de los Templarios, quienes buscan controlar a la humanidad usando un artefacto conocido como el Fruto del Edén. Esta misteriosa reliquia tiene el poder de manipular mentes y alterar el curso de la historia.

Tu misión te llevará a las grandes ciudades de Jerusalén, Acre y Damasco, donde te infiltrarás entre las multitudes, acecharás a tus enemigos desde las sombras y realizarás asesinatos precisos. Cada objetivo eliminado te acerca más a la verdad detrás de la guerra, pero también revela oscuros secretos sobre tu propia Hermandad.

Con cada paso, cuestionas tu propósito y descubres que la lucha entre Asesinos y Templarios no es tan clara como parecía. ¿Es posible un mundo sin control ni caos? En esta travesía, cada salto desde una torre y cada hoja desenvainada escribe el legado de Altaïr, el hombre que definiría la Hermandad para las generaciones futuras.