Tu misión es sencilla en teoría, pero mortalmente difícil en la práctica: destruir asteroides y enemigos mientras sobrevives al caos que te rodea.

En Asteroids, el control de tu nave es tan esencial como desafiante. Usas una palanca de dirección para moverte en un entorno bidimensional infinito, y un botón para disparar proyectiles. En cuanto al movimiento, las reglas son un poco inusuales: no hay gravedad, y tu nave se mueve de forma “inercial” de tal manera que, si dejas de impulsar la nave, esta seguirá moviéndose en línea recta hasta que frene por sí misma o se desvíe por alguna colisión. 

Además de eso, tienes que lidiar con los gigantescos asteroides, que al destruirse se dividen en fragmentos más pequeños, lo que hace que el campo de juego se llene rápidamente de fragmentos flotantes. A medida que avanzas en el juego, los asteroides se vuelven más pequeños, pero mucho más numerosos, y la dificultad aumenta de forma vertiginosa. Los asteroides no son lo único de lo que debes preocuparte, los platilos voladores enemigos también tratarán de destruirte.